La acidez estomacal es una sensación de quemazón o ardor, que comienza entre el tórax y el abdomen y sube hasta la garganta. Habitualmente este síntoma es descrito con los términos de “ardor de estómago” o “acidez de estómago”.

Lo que no hay duda es que es un síntoma gastrointestinal muy frecuente. De hecho, un 40% de las personas adultas experimentan esta sensación, al menos, una vez al mes. Es susceptible de aparecer a cualquier hora aunque suele producirse unos 30-60 minutos después de la ingesta de alimentos. Sobre todo, si la comida ha sido copiosa y rica en grasas. 

Al ser una sensación muy molesta, se hace necesario adquirir o cambiar nuestro estilo de vida para ayudar a prevenir la acidez estomacal.

Podemos destacar:

  • Comer despacio y varias veces al día.
  • Dejar de fumar.
  • Evitar el estrés. Para ello, puede ser recomendable la realización de ejercicios de relajación.    
  • No consumir alcohol. Estimula la secreción ácida.    
  • Adelgazar en caso de obesidad o sobrepeso.    
  • No te acuestes inmediatamente después de haber cenado. Espera, al menos, un par de horas antes  de hacerlo.    
  • Ni tampoco hagas ejercicio después de comer.    
  • Procura elevar la almohada cuando duermes.    
  • Evita las comidas grasas, condimentadas o fritas. Evita el chocolate, el café, el té o las bebidas gaseosas.

¿Por qué se produce la acidez estomacal? 

Existen determinados factores que pueden ser la consecuencia de padecer este síntoma como:

  • Ciertas alteraciones anatómicas como las que provoca la hernia de hiato o intervenciones quirúrgicas.    
  • Enfermedades que afectan a la capa muscular del tubo digestivo.    
  • El embarazo. Entre otras cosas, el incremento del tamaño del útero aumenta la presión intraabdominal que afecta al estómago.    
  • Diversos fármacos también pueden favorecer la aparición de la acidez estomacal.